Si quieres llegar a ver el Buda de Tian Tau y sus 26 metros de altura estás en el lugar adecuado porque vamos a contarte cómo lo hicimos nosotros.
Llegar hasta este lugar es una experiencia, cuanto menos divertida, así que vamos a explicarte cómo podéis llegar hasta el Po Lin Monastery, que es donde se encuentra la estatua de Buda más grande de Hong Kong.
Además, por si no lo sabes, esta descomunal estatua es uno de los lugares más visitados de Hong Kong.
Cómo llegar al Buda de Tian Tau en Hong Kong
Nuestro punto de partida fue la estación de metro de East Tsim Sha Tsui, la más cercana a nuestro alojamiento en el Park Hotel. Desde allí pillamos la línea roja de la MTR hasta Lai King.
El transporte de Hong Kong es fascinante, nada más bajar del tren y justo enfrente, nos estaba esperando nuestro transbordo de la línea naranja. Nuestra destino era Tung Chung. Total 32 minutos.
Cuando sales de la estación de Tung Chung verás que casi todo el mundo va siguiendo unos carteles que indican Ngong Ping 360, el nombre que le han dado al teleférico que te lleva desde Tung Chung hasta el Po Lin Monastery.
Donde fueres haz lo que vieres, aunque por la zona también hay autobuses que son más baratos, pero no tan emocionantes como el cable car.
El Cable Car Ngong Ping 360
Cuando llegas a las taquillas, lo primero es escoger el tipo de viaje que quieres. Existen cabinas normales y con suelo de cristal. En estas no haces cola y te puedes hacer una mejor idea del piñazo que te podrías llegar a pegar.
También hay paquetes que incluyen el transporte hasta el pueblo de pescadores Tai O y visita guiada por el Po Lin Monastery. Nosotros escogimos esta última opción con cabina de cristal.
Nos costó 300 HKD (28 euros) por barba, pero nos decidimos por esta opción porque la visita a Tai O nos hacía mucha ilusión y era una forma rápida de llegar hasta allí.
Sinceramente un recorrido en teleférico nunca me ha defraudado. El camino desde Tung Chung hasta la Ngong Ping Village es de los que quita el hipo. Es ahí arriba cuando te das cuenta de lo peculiar y heterogéneo que es el paisaje de Hong Kong.
Miras hacia un lado y ves un bosque de rascacielos, giras la cabeza y ves el aeropuerto más flipante del mundo. Sin embargo, conforme la cabina va ascendiendo, empiezas a descubrir otro Hong Kong, repleto de vegetación selvática y de preciosas costas.
El recorrido se hace un poco largo y además fue muy cambiante. Empezamos con un cielo nublado aunque con mucha visibilidad, pero poco a poco la niebla nos fue devorando.
Desde el teleférico captamos la mejor imagen del Buda de Tian Tau. Nada nos haría presagiar que esa sería la última vez que lo veríamos.
Por cierto, si estás pensando en viajar a esta ubre no te pierdas nuestro post sobre qué sitios visitar en Hong Kong.
Información Bitacoras.com…
Valora en Bitacoras.com: Uno de los episodios más desafortunados de nuestro viaje a Hong Kong fue el que protagonizaron los Budas en la niebla. Llegar hasta allí y no ver los 26 metros del Buda de Tian Tau tiene miga. Sin embargo, nos gusta quedarnos…..
Pues fíjate que yo soy de las que piensas que no tuvisteis mala suerte si no al contrario! Al menos tus fotos del buda, recubierto de esa niebla son una pasada… le dan un aura fantasmagórica… mucho más mística que si lo hubieras visto bajo un sol radiante…
@Purkinje, bueno siempre tenemos que ser positivos, hasta en estas circunstancias 😉
No creo que tu historia haya sido desafortunada. Después que no te hayan robado, no creo que una niebla sea motivo de infortunio.
Y yo metido en las Mansions por los tifones ( o eran huracanes) 😉 . Lo dejo para la siguiente visita a Hong Kong
La verdad que la última foto así con la niebla y tal le da un royo guay.
Pero te entiendo hubiera molado verlo en todo su esplendor 🙂
A la próxima 😛
@Osvaldo, bienvenido a ‘el pachinko’. Eso es optimismo 😉
@Iván, jajajaja lo tuyo con las Mansions de Tsim Sha Tsui fue amor a primera vista 😉
@Xavi_kun, claro, fue una jornada muy completa, pero faltó la guinda.
Es una pena que estuviese con ese mal tiempo y con la niebla pues no les dejase el buda en todo su esplendor. No obstante, como apuntas el recorrido en teleférico es muy interesante y relajante también. Yo que lo tengo ahí a tiro de piedra, cualquier finde de estos es una buena opción 🙂
@Javier, tú lo tienes muy muy cerquita, aunque me imagino que lo tendrás muy sobado 😉